domingo, 22 de abril de 2007

Vicente Fox y la ciencia de ser tu propio enemigo

Desde diciembre del año 2000 a diciembre del 2006 todos los mexicanos gozamos y pasamos vergüenzas con todo lo que nuestro señor ex presidente hizo y deshizo. No es necesario hurgar mucho en la memoria para recordar a Jorge Luis "Borgues", las lavadoras de dos patas, que gracias a Memín Pinguín en México queremos a los negritos, al Premio Nobel Mario Vargas Llosa y otras linduras más. Y es que en muchas ocasiones parecía que Fox era una máquina de exterminio o mejor dicho de auto-exterminio, pues el pez por la boca muere; diría mi abuela.

¿Qué es lo que lleva a una persona a joderse la existencia a sí misma? Ese, es un gran dilema y lo es porque no sólo ocurre con Vicente Fox y sus famosas frases sino también a un nivel fisiológico. ¿Cómo? ¿Dónde? ¿Por qué? Muchos pacientes se preguntan lo mismo cuando su médico les dice: USTED TIENE UNA ENFERMEDAD AUTOINMUNE.

Todos los seres vivos (mamíferos) estamos provistos de un gran ejército de batalla contra agentes infecciosos, sustancias químicas y posibles patógenos. De una manera muy burda el sistema inmune se compone de células capaces de destruir agentes extraños por sí mismas y células que pueden liberar anticuerpos a fin de neutralizar agentes extraños. Ahora bien, cuando las cosas no funcionan como debieran el sistema inmune puede reconocer a algunas células o moléculas propias del organismo como extrañas y ahí comienza la pesadilla.

Los trastornos autoinmunes se desarrollan cuando el sistema inmune destruye los tejidos normales del cuerpo, lo cual es causado por una reacción de hipersensibilidad similar a las alergias, en donde el sistema inmune reacciona a una sustancia que, normalmente, ignoraría. En las alergias, el sistema inmune reacciona a una sustancia externa que normalmente sería inofensiva y con los trastornos autoinmunes, el sistema inmune reacciona a los tejidos corporales normales propios.
Los trastornos autoinmunes se presentan cuando se interrumpe el proceso de control normal, y también se pueden presentar si se alteran los tejidos normales del cuerpo, de tal manera que ya no son reconocidos como propios. Se desconoce el mecanismo que causa esta interrupción del control de las células o cambios en los tejidos; sin embargo, hay una teoría que sostiene que varios microorganismos y medicamentos pueden desencadenar algunos de estos cambios, especialmente en las personas que tienen predisposición genética a los trastornos autoinmunes.

Los trastornos autoinmunes causan destrucción de más de uno o más tipos de tejido del cuerpo, crecimiento anormal o cambios en la función de un órgano. Este trastorno puede afectar solamente un órgano o un tipo de tejido o puede afectar múltiples órganos o tejidos. Los órganos y tejidos que se ven comúnmente afectados por trastornos autoinmunes son los componentes de la sangre como los glóbulos rojos, los vasos sanguíneos, los tejidos conectivos, las glándulas endocrinas tales como la tiroides o el páncreas, los músculos, las articulaciones y la piel.

Los principales padecimientos a causa de trastornos autoinmunes son:
  • Lupus eritematoso sistémico. Se produce cuando los anticuerpos desconocen y por tanto atacan al colágeno que da soporte a los tejidos produciendo inflamación generalizada, dolor en el pecho, erupciones en piel, dolores musculares e incluso la muerte.
  • Diabetes tipo I. Los autoanticuerpos atacan a las células beta del páncreas provocando que ya no se secrete insulina para metabolizar la glucosa.
  • Tiroiditis de Hashimoto. Se produce por una respuesta autoinmune contra la tiroides provocando generalmente hipotiroidismo y todos los íntomas derivados de tal efecto.
  • Esclerosis múltiple. Los anticuerpos desconocen al recubrimiento del tejido nervioso (mielina) y entonces se produce una inflamación generalizada del cerebro y principalmente de la médula espinal con consecuencias fatales como pérdida de la movilidad de las extremidades, temblores, dificultad para hablar y una disminución importante de la calidad de vida.
  • Artritis reumatoide. Es quizá el trastorno autoinmune más común y en el cual se reconocen como extraños los tejidos de las articulaciones; principalmente de muñecas, codos, dedos y rodillas provocando deformidad de los huesos.
  • Anemia perniciosa. Se da por un ataque contra células gástricas que absorben la vitamina B12. Si se ataca la vía de absorción de esta vitamina entonces se producirán glóbulos rojos con una capacidad muy disminuida de transportar oxígeno y por tanto todos los signos propios de las anemias.
¡Chiquillos y chiquillas! Vivimos una ruleta rusa y aunque no es posible saber quién puede adquirir o no una enfermedad autoinmune es importante llevar un estilo de vida lo más saludable posible. Coma frutas y verduras y por favor si encuentra a Vicente Fox ¡¡mátelo!! ya que esa es la verdadera función del sistema inmune.

Gracias mexicanos y mexicanas...